Una Fassi F255RA al servicio de los alicatadores

Rapidez y seguridad. Flexibilidad y potencia. Estas son las cuatro características que empujaron a la empresa constructora alemana Fliesen-Witzig a elegir una F255RA para las operaciones de manipulación y elevación de materiales en su trabajo diario.

¿Sus ventajas? “Las excelentes capacidades de elevación, la gran maniobrabilidad y la posibilidad de trabajar en espacios reducidos y en obras difíciles”, confirma Tobias Lindner, asesor comercial de Fassi para la región norte de Alemania Oriental.

Una de las intervenciones más recientes se refiere a su utilización para el movimiento de 7 quintales de baldosas, llevadas sin dificultad al cuarto piso de un edificio en la cercana Wurzen-Nord.

El F255RA, montado sobre un chasis MAN-TGS de 3 ejes, cargó 700 kilogramos de baldosas para colocarlas en el interior de los apartamentos en renovación gestionados por la cooperativa de construcción Wurzen eG.

El vehículo Fliese-Witzig conducido por Karsten Müller llegó debajo del edificio, donde lo esperaban en el cuarto piso los dos alicatadores Jürgen Heuschkel y Meinhard Tauchnitz.

Las operaciones de estabilización del vehículo, movimiento y descarga de la mercancía duraron en total menos de 30 minutos: Müller preparó la grúa colocando el estabilizador hidráulico del camión y bajando el lateral de la carrocería. Con el radiocontrol Fassi abrió las extensiones telescópicas de la grúa y enganchó la carga. Los 7 quintales de tejas fueron elevados a una altura de 14 metros y luego descargados manualmente porque el techo del mostrador impedía la instalación directa en el suelo.

“Elegimos la grúa Fassi 255RA montada sobre un MAN-TGS con chasis de 3 ejes, después de una cuidadosa evaluación – explica Jan Witzig, propietario de la empresa constructora -. Es una solución que se adapta perfectamente a nuestra rutina diaria de trabajo y gracias a esta grúa se pueden realizar muchas operaciones de forma más rápida y segura. Además, la carga de trabajo de mi personal se ha reducido significativamente».

Una satisfacción que también destaca Karsten Müller, empleado de Fliesen-Witzig: «Debo decir que fue una inversión realmente excelente».